Peeling facial: tipos y recomendaciones
Para iniciar, diremos que los peelings son tratamientos generalmente faciales que quitan una capa superficial de la piel, dejando expuesta una piel suave y brillante.
¿Qué es?
Los peelings son exfoliaciones químicas profundas, lo cual ayuda a mejorar la apariencia al desprenderse de la piel muerta.
Algo que cabe mencionar es que ayuda a dar un aspecto rejuvenecedor debido a la limpieza que tiene la técnica en el área facial.
Sin embargo, también la podemos usar de manera corporal, para eliminar impurezas de la piel a modo de exfoliación.
Tipos de peelings
Químico:
- Se enfoca en aplicar ácidos a diferentes profundidades
- Suave o superficial (se puede realizar una vez por semana)
- Medio (recomendable para combatir cicatrices, se realiza 1 o 2 veces por año)
- Profundo (penetra en capas profundas, su usa para minimizar arrugas)
Mecánico:
Durante el proceso se usan cepillos o cristales
Físicos:
Es a través de luz láser
Ácidos usados para peelings faciales
El producto elegido será con base al tipo de piel del paciente, su estado dérmico, edad y el efecto que busca conseguir.
Glicólico
Salicílico
Mendélico
Resorcina
Tricloracético
Fenol
Recomendaciones
- No usar cremas con ácidos 3 días antes
- Desengrasar la cara
- Limpiar el rostro
- Colocar el material elegido y dejar actuar (el tiempo depende del estado de la piel)
- Posterior de retirar el tratamiento colocar una mascarilla hidratante.
¿Para qué se usan los peelings faciales?
Principalmente este proceso es usado por su efecto rejuvenecedor, aunque también ayuda a tratamientos como por ejemplo:
- Tratar arrugas
- Disminuir líneas de expresión
- Eliminar manchas
- Dar un color uniforme en la zona trabajada
- Efecto hidratante
- Tratar cicatrices de acné